El Gran Premio Internacional de Atletismo Valencia 2024 reunió a más de 5.000 personas en el Velódromo Lluís Puig. Ya es el mitin con más público de España
Quique Llopis logró la mínima para el Mundial de Glasgow bajo techo en los 60 metros vallas; Fátima Diame y Eusebio Cáceres también brillaron en la longitud
El Gran Premio Internacional de Atletismo Valencia 2024 vivió este miércoles una de las grandes jornadas del deporte rey, en el inicio de la temporada bajo techo. El mitin valenciano del Velódromo Lluis Puig ya es uno de los más multitudinarios de España, pues pobló ayer sus gradas con más de 5.000 asistentes que vieron en directo las grandes actuaciones de los valencianos Quique Llopis, Fátima Diame o Eusebio Cáceres -un trío de ases vinculados al Proyecto FER– y también de la armada española: Ana Peleteiro, Adel Mechaal, Adrián Ben, María Vicente… Todos sintieron el aliento del público valenciano, que de alguna forma pidió a gritos que el Europeo de Atletismo de 2027 aterrice en la ciudad. Uno de los grandes retos de la Comunitat de l’Esport a medio plazo.
Fátima Diame y Eusebio Cáceres, destacados
La saltadora Fátima Diame se llevó el triunfo en la longitud tras un salto de 6.53 y cinco viajes invalidados hacia la arena. Diame jamás había visto la instalación con ese ambiente en las gradas, con tanta gente ansiosa de magia: “Y eso que prácticamente he vivido aquí”, afirmaba. Decía también que venía de cargar volumen de entreno en Barcelona, que la pista cubierta es puro trámite este curso, que sus objetivos aguardan en verano y que confía en ella y su entrenador -también el de Ana Peleteiro-, Iván Pedroso. «Se qué se espera mucho de mí hace tiempo… voy a mi ritmo pero, ¿por qué no va ser este mi año?”.
Una serie calcada, victoria, cinco nulos y un único brinco válido (también el cuarto: 7.73), ofreció su compañero de entrenamiento y gran referente del la Comunidad Valenciana, Eusebio Cáceres, quien reconocía tener “un problema»: «Tengo que arreglar el ajuste en la tabla pero me quedo con que los nulos han sido largos”. Cuarto en Juegos, Mundial y Europeo, aseguraba “sentirse como un juvenil, probando cosas nuevas y viendo que estoy fuerte y con ganas de volver a saltar mucho” cuando se le preguntaba por su segunda temporada bajo las órdenes de Pedroso.
Mínima mundialista para Quique Llopis
En los 60 metros vallas Quique Llopis clavó la mínima mundialista: 7,62. El coplusmarquista nacional aseguró “no haber encontrado sensaciones» y dijo estar «menos en forma que el invierno pasado y focalizado en el verano”. Su compañera de prueba Paula Blanquer se lucía en casa firmando 8.24 y demostrando que presente y futuro de la especialidad pasan irremediablemente por su talento para flanquear barreras.
Espectáculo de Adel Mechaal
La última carrera de la tarde fue el monólogo de Adel Mechaal en los 3000 metros. El que fuera campeón continental de la distancia, adicto al espectáculo como siempre, echó un pulso al reloj y ganó: 7:43.60, mínima para el Mundial de Glasgow y mejor marca española del año. Tras su esfuerzo declaró que “esta época del año alcanzo mi máximo estado de forma, me gusta disfrutar de la cubierta aunque no la prepare específicamente. Mi único objetivo es disfrutar, pero si algo me quita un poco el sueño es bajar de 3:30 este verano”.
El plusmarquista español de 1500 en pista corta no eludió el tema candente del día, la suspensión provisional de Mohamed Katir por parte de la Unidad de Integridad del Atletismo: “Hace muy bien su trabajo, es un organismo serio y correcto, el caso de Katir no es como mi caso, que dependía de la CELAD, que deja mucho que desear y nos quita credibilidad a los atletas. Es una buena noticia para el atletismo lo que ha sucedido hoy”. Esta circunstancia ha impedido a la organización del evento llevar a cabo la prueba de 5000 metros en la que Katir pretendía atacar el récord de Europa.
Ana Peleteiro, gran reclamo
Y para echar el cierre, el gran reclamo. O uno de ellos en esta edición del Gran Premio: Ana Peleteiro. La gallega, medallista olímpica y con el foco en los Juegos tras ser madre, no llegó la tan ansiada mínima para París, pero su serie fue muy equilibrada: un nulo y cinco saltos por encima de 14 metros, el más largo, que le dio el triunfo, 14.10.
Otra de las grandes de nuestro atletismo, la plusmarquista nacional de pentatlón, María Vicente, concluía segunda a sólo dos centímetros de Ana, que declaraba estar “muy contenta porque esta estabilidad por encima de 14 quiere decir que está a punto de salir. Quiero volver a mi nivel, pero es un proceso que hay que buscar. Me falta competir, no soy capaz de entrenar a este nivel. Cuando te rodeas de gente que te hace bien te pasan pocas bonitas, tengo una familia y una hija maravillosas, solo me tengo que ocupar de trabajar y traer de comer a mi casa”.